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A tres cuartos de tu habitación no puedes ver ni sentir mis pensamientos, no quiero crear un simbiosis contigo, pretendemos querernos solo de vez en cuando y a veces, solo a veces cuando quieres, cuando quieres soy todo lo que una ves esperaste y a veces, cuando quiero lo acepto. Me ciego ante la idea de que eres lo que quiero, pero aún así no lo que necesito, pretendes quererme algunas veces a la semana, por chat, por mensajería, pero no por presencia, te buscó y te escondes, incluso a veces te recorres para que yo vaya como desesperado detrás de tu presencia, no encuentro tu esencia e intentado acoplarme a tu forma de ser. a tus berrinches extraños, al hecho de que no seas como me había imaginado, incluso al hecho de que ni si quiera seamos algo más que amigos.

En tres días quizá el cuarto ya no estaré para ti, debo aceptar que soy vulnerable a tu olor, tu mirada y tu sonrisa, pero a pesar de todo eso, juro que no vuelves a escuchar mi voz.

19-08-19

¿Sentir ese escalofrío cada vez con mas frecuencia es normal?
Aislarte sin querer que nadie te hable o incluso te escuche y el punto es ¿Que punto tiene realmente?Somos tan egoístas que si alguien te cuenta sus problemas ante pones los tuyos y tienes el descaro de decir "Te entiendo, ya he pasado por eso" "Echale huevos, solo así se pasa ese sentimiento" pero lo que ellos no saben es que no entienden ni una mierda, ni una encarajada pista de lo que pasas cuando te vas a acostar sin poder dormir o levantarte a cada hora porque sientes que te ahogas con tu propia respiración.

Al levantarme lo único que pienso es volver a esconderme entre los ropajes de mi cama y no salir de ahí, intentó escapar del sentimiento de estar en ningún lado por culpa de mi cabeza. Distraerme con cualquier cosa momentánea si así lo quieres ver, porque cuando regrese a mi lugar me voy a perder de nuevo dentro de mis pensamientos y pensar mierdas que jamás se callan y se hacen mas fuertes, no me dejan pensar como solucionarlo. me atan y amordazan, no quieren que juegue más, solo están ahí,  susurrándome que ya estuvo bien de luchar contra lo inevitable, sumiéndome más en un hoyo que estoy cavando en contra de mi voluntad.

Me escudriño con mis cascos para silenciar lo que me aqueja en mi cabeza, quiero poder llorar pero no puedo, hay algo suprimiendo ese sentimiento y no me lo permito. Me digo a mi mismo que no soy tan débil pero que tiene de fuerte reprimir un llanto. 

Mis metas se desvanecen poco a poco, se nubla mi mirada e intento evitar el contacto directo ¿Por que mierdas me miran? ¿Por que mierdas no se largan todos? 

Para mi Padre

No eres la relación de tus padres, no eres tu padre ni ella es tu madre, date cuenta de que estas cargando con más de lo que mereces, que tu niñez te fue arrebatada injustamente, no tienes que tragarte nada, excepto el orgullo para contarme tus penas, no entiendo muchas de tus acciones desmedidas, de tus celos irracionales y tu machismo estúpido y aferrado, pero eso no quiere decir que no este dispuesto a escucharte, a abrazarte, a amarte. No estoy al pendiente de lo que pasa en tu cabeza, porque siendo sinceros ¿Cuando nos hemos acercado lo suficiente para tener una conversación de padre e hijo?

Sé que quizás en estos momentos creas que todos estamos en tu contra, que creemos que eres el malo del cuento, date cuenta de que no es así, no queremos buscar culpables y hasta ahora lo reflexiono, debemos buscar soluciones, quiero que nos quieras de otra forma, quererte como siempre hemos querido hacerlo, no te cierres ni te ciegues ante lo que la vida te ha enseñado, no eres tu pasado, no eres tu futuro incierto y nada seguro, eres tu presente, nuestro presente juntos.

Cuando era niño siempre admiré la tenacidad de ese hombre trabajador que me enseño que el valor del trabajo duro siempre viene con una recompensa, que tienes que hacer todo lo mejor que puedas por tu familia, admiré cada momento de enseñanza, aunque fuera a la fuerza.

No pierdas quién eres padre, no te pierdas en el camino de tus pensamientos porque incluso en momentos de tensión ellos pueden traicionarte. Tuviste una vida muy dura, una vida que estoy seguro no le deseas a nadie, pudiste salir adelante, no transmitas ese odio, ese rencor, esos celos, no te recordaremos por eso, porque realmente recordaremos a ese hombre que un día me enseñó que la familia es lo primero.

Te estas dando cuenta de que el mundo es crudo y folla a cada minuto, no es mudo a pesar de que creas que no lo escuchas, tus sentidos se dislocan con cada pequeña cosa que influye, fluye o deja de fluir a tu alrededor, cuida tus pensamientos para que cuides tus palabras, no hieras sin necesidad porqué ya hay mucha mierda en el mundo para que tu seas parte de ella, no seas único e irrepetible, se tan solo tú, tanto como puedas.

No le creas a su mirada inocente, ni a su voz tierna y dulce, es una trampa, de esas de las que te envuelven completamente y te engullen en un segundo, has estado antes ahí, sabes como se juega, pero en esta partida mantén tu postura y trata de aferrarte a tus convicciones.

Me veo en la escabrosa necesidad de pensar en ti solo como un pasaje de ida, sin retorno, sin seguro de vida, dejando de lado mis convicciones a las cuales estaba tan aferrado, consumiendo tan rápido mi autosuficiencia y sumándome a los  inapropiados momentos en que se te ocurre molestarte en textearme para mantenerme atado, a nada, a la esperanza, liberándome pero al mismo tiempo sumergiéndome más en una oscuridad que en realidad nunca extrañé, tus inexpugnables sentimientos a los cuales de una forma u otra me aferro, por más que intento elucubrar como liberarme e incluso, cada que lo intento, liberas un poco más del veneno que salen de tus palabras texteadas, porque en realidad no somos más que extraños, que casualmente nos encontramos en un momento efímero, de caricias vacías, promesas que sabíamos que ninguno de los dos iba a cumplir.

Ante la sociedad, ante el mundo quieren conocer que hay entre nosotros, si tan solo ellos supieran que no somos ni la mitad de lo que fingimos ser, adornando de besos insípidos, de tratos tan vacíos como una taza de café un viernes por la noche, de miradas desviadas y atenciones desvanecidas, porque claro, quién querría mostrarse débil, acechado... vulnerable.

18-03-19

El tiempo nos condena, a veces a una larga espera para un objetivo que anhelamos pero desgraciadamente no vamos a alcanzar, a veces, es doloroso, incesantemente doloroso, cansado, estúpidamente eterno ¿Las cosas malas siempre son lentas no lo crees? quizá para ti fue diferente, tomaste todo ese dolor, cansancio y desesperación, y lo convertiste en alegría, risas, momentos felices, te admiré siempre por eso, no fingías estar feliz para no generar preocupación, en verdad eras feliz, no eras como yo ¿Sabías de antemano que no lo lograrías? o quizá ¿Te aferrabas cada instante aprovechandote de la lentitud del tiempo?

No dispongo de muchas palabras porque en realidad siento que no te conocí muy bien pero a la vez era la persona que más podía comprenderte. Aún recuerdo cuando nos conocimos ¿Sabes? fue en el coloquio del hotel, no recuerdo su nombre, te observé cuando entre y de inmediato lo supe, tenía que conocerte, tenía que intentar ayudarte, no por mi, por ti, o quizás en mi búsqueda de redención y en parte egoísmo también lo hice por mi,  no lo sé. 

Siempre que te veía, estabas sonriendo, hablando naturalmente, nos hicimos hermanos por una misma situación, es increible como las desgracias de la vida traen consigo personas adecuadas, recuerdo lo emocionado que estabas porque habías conseguido una cita con el doctor L. después de tanto tiempo, a decir verdad, cada que me mandabas un mensaje esperaba que me dijeras "lo logré, el siguiente, mes/año/bimestre, me intervienen" ese mensaje nunca llegó y nunca llegará, peleaste como muchos y perdiste como muchos, no lo merecías ¿Sabes? merecías recobrar la vitalidad que quizá atrora pudiste tener, o quizá, desde otro punto merecías algo mas grande que eso y por eso es que te adelantaste.

Pero ahora cenas en la gran mesa del Valhalla con otros grandes guerreros, Odín se complace de tenerte como invitado, fuiste un bravo guerrero hasta el final, hoy tienes el honor de cenar en compañía de los dioses.

Me tomaré un café o una cerveza en tu honor hermanito, esa que nos prometimos cuando estuvieras recuperado, un abrazo eterno.

He llegado a la conclusión de que un cigarrillo debe hacer bien, para matar tu ausencia, ocultar tu olor y sobre todo sofocar tu recuerdo, ese intercambio silencioso entre yo. el aspirar y expirar el dulce humo que te va sacando dentro de mí poco a poco.

No te equivoques, no es cuestión de querer si no de necesidad el querer asfixiarte, que te esfume entre el tiempo que terminó de fumar y sigo con mi rutina, que ya no te necesito, ni te pienso como antes, que eres más efímero que el fumar de este cigarrillo que me implora serenidad, paz pero sobre todo muerte ante mis labios. 

Que quiere y no quiere  volver a olfatear tu sexo, saborear tus jugos y penetrar tus nervios, estimular tus sentidos y jugar tu juego.